El contacto piel con piel entre la madre y el bebé favorece la LACTANCIA materna

Según datos de la Asociación Española de Pediatría de 2010, el 80% de las madres da el pecho a la salida del hospital. Una vez en casa, sólo el 52,5 % lo mantiene a los 3 meses. A los seis meses, apenas una tercera parte de ellas (36%) continúa con la lactancia materna. 

Según datos de la Asociación Española de Pediatría de 2010, el 80% de las madres da el pecho a la salida del hospital. Una vez en casa, sólo el 52,5 % lo mantiene a los 3 meses. A los seis meses, apenas una tercera parte de ellas (36%) continúa con la lactancia materna. 

Para favorecer el establecimiento de la lactancia materna, el niño sano debe ponerse en contacto directo con la madre, piel con piel, desde el mismo momento del nacimiento y mantenerse así hasta que se produzca la primera toma. Salvo en el caso de circunstancias excepcionales, el recién nacido debe permanecer con la madre, en la misma habitación. Asimismo, debe alimentarse al pecho a demanda, no se debe esperar a que el niño llore; si está despierto, buscando o con un incremento de actividad, debe de ponerse al pecho. Durante los primeros días se recomienda que al menos haga 8 tomas. La duración de las tomas la determina el propio niño, lo ideal es esperar a que se suelte del pecho espontáneamente. 

 

Ni suplementos ni chupetes

No se deben administrar suplementos (agua, suero glucosado, sucedáneo de leche de madre, zumos, etc.) cuando se está instaurando la lactancia ni posteriormente, salvo que hayan sido indicados por el médico. Es mejor evitar el uso de chupetes durante el periodo de inicio a la lactancia materna y emplearlos solo cuando esté bien establecida. 

Después del alta hospitalaria, el niño debe ser valorado por el pediatra o por una enfermera experta en los 5 o 7 días siguientes, que reconocerá al recién nacido, reforzará la lactancia y ayudará a la madre a resolver las dificultades que hayan podido surgir.

 

Beneficios de la lactancia materna para el bebé

– Aporta todos los nutrientes que necesita para un desarrollo sano.

– Constituye la primera inmunización del recién nacido: contiene anticuerpos que ayudan a proteger al lactante de enfermedades frecuentes, infecciones y alergias.

– El acto de amamantar crea y mejora la relación madre-hijo, favoreciendo el apego a su madre.

– La digestión de la leche materna es más fácil y eficiente, y se adapta a las necesidades del bebé en cada momento.

– El alimento está siempre preparado, a la temperatura adecuada y en perfectas condiciones higiénicas. Fácil de conseguir, asequible, lo que garantiza la cantidad suficiente al lactante.

– Disminuye considerablemente el riesgo de muerte súbita y la obesidad.

Beneficios de la lactancia materna para la madre  

– Acelera la recuperación física y reduce la tasa de obesidad.

– Reduce el riesgo de cáncer de mama y ovario.

– El contacto continuo con el bebé ayuda psicológicamente a la madre en el postparto.