12/06/2017
Los pediatras de Atención Primaria dejan claro que las vacunas no provocan autismo. Lo realmente peligroso es no vacunar al niño y que enferme: el sarampión es una enfermedad grave que está creciendo en Europa y que debilita el sistema inmunitario, por lo que sus complicaciones son frecuentes y graves. Puede evitarse con la vacuna, que es totalmente segura.
Las vacunas no provocan autismo
El autismo no está relacionado con las vacunas. Es un tema que quedó claro en 2014 cuando se realizó un metaanálisis (análisis de los estudios existentes) para descartar esa relación. Se revisaron cinco estudios que incluyeron nada menos que a 1.256.407 niños y cinco estudios de casos y controles que incluyeron a 9.920 niños. No se encontró relación entre la vacunación y el autismo.
Lo realmente peligroso es no vacunar a los niños. Otro trabajo, esta vez más reciente (2016), donde se estudiaron siete revisiones sistemáticas, 15 revisiones, 15 estudios observacionales, 1 estudio cualitativo, 5 informes epidemiológicos y 2 libros, dice que la infección por sarampión conduce a la supresión inmune del organismo durante semanas o meses, por lo que sus complicaciones son frecuentes y graves. No existe un tratamiento antiviral específico para el sarampión. La vacunación es la única forma de prevención y es segura.