Masajear la zona del periné, realizar ejercicios con fitball o practicar Yoga o Pilates, y hacer a diario los ejercicios de Kegel, te van a ayudar a evitar la episiotomía durante el parto. Te contamos cómo debes hacer los ejercicios y los masajes durante el embarazo.
Aunque en los últimos años las episiotomías han experimentado un fuerte descenso, fomentado en gran medida por las políticas de desmedicalización de la atención al parto que se están impulsando, aún queda mucho camino por recorrer hasta cumplir con las recomendaciones del Ministerio de Sanidad. Actualmente se intenta reducir aún más el número a través de la “Estrategia de la Atención al Parto Normal”. En base a las pautas que se dan en este programa, muchos ginecólogos y matronas son partidarios de evitar en la medida de lo posible la práctica de la episiotomía. Según datos de partos en la Maternidad de O’Donnell (Hospital Gregorio Marañón en Madrid), una de las más grandes de la capital de España, y de varios centros privados, “durante el pasado año 2011, de las 150–160 mujeres recién paridas que pasaron por mi consulta, el 75-80% tenía episiotomía, tanto primíparas (primer parto) como secundíparas (más de un parto), siendo casi un 65% de los partos eutócicos (partos normales) y el 12-13% partos instrumentales, en su mayoría con fórceps; el resto son cesáreas 20-22% y un grupo pequeño de mujeres había parido sin episiotomías pero con desgarros”, explica la matrona Mª Carmen Cuadrado Orduña, del Centro de Salud Goya, en Madrid.
Cuándo se realiza la episiotomía
La episiotomía se realiza cuándo la cabeza del bebé atraviesa la vulva, justo antes qué salga el cuerpo del bebé. Se trata de un corte que el médico realiza en el periné (zona entre la vagina y el ano) para ampliar el orificio vaginal y conseguir que el niño salga. “Durante el parto, la palidez del peroné precede a su desgarro, cuando la amplitud y elasticidad de la musculatura del conducto blando del parto es desfavorable es preferible realizar una episiotomía”, explica la matrona. Las mujeres más propensas a que se les realice este corte durante el parto son las primíparas (primer parto), las que tienen fetos grandes (con peso superior a los 3.500 g.) y las de baja estatura.
Ejercicios y masajes para evitar la episiotomía
Es fundamental preparar la zona del periné para la hora del parto con el objetivo de prevenir, en la medida de lo posible, este tipo de incisiones o los desgarros. Para ello se recomienda realizar durante el embarazo una serie de ejercicios a diario y dar masajes en la zona con un producto adecuado para conseguir una mayor elasticidad en el periné.
– MASAJES para aumentar la elasticidad del periné. Recomendados por la Federación de Asociaciones de Matronas de España (FAME). Se deben realizar dos días por semana, entre cinco y diez minutos, y hay que comenzar unas cuatro o seis semanas antes del parto. Para ello, debes ponerte cómoda (en cuclillas, sentada o tumbada); impregna tus dedos índice y pulgar con aceite 100% natural, la más recomendada es el aceite de Rosa Mosqueta; y realiza, presionando levemente, movimientos en forma de U en el periné (zona entre la vagina y el ano). No conviene dar masajes en la zona interior de la vagina, sólo en la parte externa.
– EJERCICIOS CON FITBALL (balón terapéutico). Esta disciplina se llama Esferodinamia y consiste en realizar ejercicios sobre un gran balón. Sólo con sentarse sobre el mismo y moverse suavemente ya se ejerce masaje sobre el periné. Muchas maternidades ofrecen a las embarazadas la posibilidad de realizar ejercicios sobre estos grandes balones antes de dar a luz, durante el periodo de dilatación. El Yoga y el Pilates son disciplinas que también están recomendadas, ya que al igual que la anterior, permiten mejorar la circulación, la elasticidad, y reforzar el tono de la musculatura pélvica a la vez que enseñan a controlar la capacidad respiratoria.
– EJERCICIOS DE KEGEL. Sirven para fortalecer el suelo pélvico de cara al parto. Son sencillos: consisten en contraer la musculatura vaginal durante varias veces al día (unas 200 veces repartidas en varias series). El ejercicio es similar al que se realiza cuando al orinar se corta la micción de manera voluntaria o cuando se contienen las ganas de orinar.