Estamos en temporada alta de frutas: melocotón, albaricoque, melón, sandía, manzana, higos, pera… Si a tu hijo no le gusta la fruta, ahora es el momento ideal para preparar cualquier variedad de un modo original. Te damos muchas ideas para que le guste… y le va a gustar.
Los niños deben tomar fruta a diario, ya que se trata de un alimento muy rico en vitaminas, minerales y fibra. La vitamina C y la provitamina A (betacaroteno) poseen una acción antioxidante muy importante para la salud. Las frutas de color naranja o amarillo suelen ser muy ricas en estas vitaminas. “Además, en los vegetales en general, hay compuestos fotoquímicos, como los flavonoides, que también tienen función antioxidante. La fruta es una fuente de sustancias que ayudan a mantener la salud y prevenir enfermedades, por eso se aconseja tomar un par de piezas al día a partir de los 5 años”, indica la nutricionista Magda Carlas.
Muchos niños rechazan la papilla de frutas desde el inicio. “No se sabe con certeza, pero parece que el sabor ácido en los más pequeños no acaba de gustar. De ahí que las frutas con sabores más dulzones o neutros como el plátano o la manzana sean más fácilmente aceptados por los niños”, explica la nutricionista. Hay estudios que demuestran que los alimentos más aceptados por los peques son la pasta, las patatas fritas y la carne rebozada, además por supuesto de lo dulce.
Cuando le ofrezcas fruta es importante que tengas en cuenta la edad del niño: si es muy pequeño (menos de cinco o seis años), no le des frutas enteras con hueso o semillas (cerezas, manzanas, melocotón, albaricoques, etc.) porque se puede atragantar.
Cómo preparar la fruta para que le guste
Si estáis empezando con las papillas de fruta, no le mezclas las cuatro frutas (naranja, pera, manzana, platano). Mejor dale primero la pera y vete introduciendo poco a poco las otras, a veces es el sabor de una de ellas lo que hace que rechace toda la papilla. “Si es un niño antifruta, se le debe dar la fruta cuando el pequeño tenga más apetito, si es necesario, antes del primer plato”, indica Magda Carlas. Otras sugerencias que te pueden servir son las siguientes:
HASTA LOS DOS AÑOS. En esta franja de edad debes tener en cuenta que el pediatra haya dado “luz verde” para que el pequeño pueda tomar las frutas que te sugerimos, así como los alimentos propuestos para combinarlas (yogur, galleta o bizcocho con gluten).
– Mézclala con leche. Puedes echarle un poco de leche de fórmula o materna al puré de frutas para que no extrañe el sabor, pero han de ser frutas no ácidas, como la pera, la manzana o el plátano.
– Échale al puré de fruta unas galletas, bizcocho o incluso unas cucharadas de yogur si al niño le gusta.
– Añade al puré de zanahoria, por ejemplo, un poco de zumo de naranja.
– Preséntale la fruta en forma de macedonia: a partir de los 18 meses, cuando ya pueda comer de casi todo, coloca trocitos de fruta (melón, sandía, pera) de diferente color en un plato y adórnalo con algunas de sus golosinas preferidas.
– Acompaña la carne picada de su segundo plato con compota de manzana o pera. Como es lógico, esta sugerencia debes ponerla en práctica cuando el niño ya tenga dientes y sepa masticar la carne (alrededor de los dos años).
DESPUÉS DE LOS DOS AÑOS
– Haz crepes de fruta, por ejemplo de plátano y fresas.
– Prepara una deliciosa pizza de fruta poniendo un leve toque dulce en la masa y combinándola con queso fresco. La manzana y la pera quedan geniales en forma de pizza.
– Combina la fruta con su helado preferido o trocéala en juliana y mézclala con sus cereales.
– Echa un chorrito de chocolate caliente encima de la macedonia, hará que hasta el niño más reacio sea amante de la fruta.
– Prueba a hacer un sándwich de fruta cortada, por ejemplo pera, y queso tipo ricotta, ¡está delicioso!