El varicocele

El varicocele es la principal causa de infertilidad masculina. Puede tratarse con una técnica quirúrgica sencilla, aunque la fertilidad no se recupera en todos los casos. Según datos de diferentes estudios, existe una tasa de embarazos de entre el 30 y el 40% en parejas infértiles, en las que el varón con varicocele fue intervenido.

El varicocele es la dilatación tortuosa de las venas espermáticas, lo que provoca un aumento de la temperatura en el escroto (bolsa donde se alojan los testículos) que puede afectar al correcto funcionamiento de los testículos. Suele localizarse en el lado izquierdo, aunque también existen casos de varicocele en el derecho. Representa la principal causa de infertilidad masculina, “según grandes estadísticas, supone el 42% de las causas de infertilidad masculina, muy por encima del resto de etiologías; por ejemplo, la infertilidad de causa desconocida, donde no se logra descubrir la etiología, supone el 22 %”, explica el Dr. Roberto Llarena Ibarguren, urólogo y colaborador de la Unidad de Reproducción Asistida de la Clínica Quirón en Bilbao. El varicocele se presenta en el 15% de los varones, pero no siempre produce alteraciones en la fertilidad.

Cómo saber si existe varicocele

El varicocele se puede diagnosticar desde que se inicia y consolida el desarrollo de los genitales externos, alrededor de los 15-16 años. En la actualidad, el diagnóstico en el adolescente lo realiza el pediatra y lo ratifica el urólogo. En adultos, el diagnóstico lo establece el médico especializado en fertilidad, generalmente un ginecólogo.
Para saber si existe varicocele el especialista realiza una exploración física, “Normalmente la simple exploración física es suficiente. La acumulación de varices a nivel del cordón espermático izquierdo, como si se tratara de “un saco de gusanos”, suele ser suficiente”, explica el Dr. Roberto Llarena Ibarguren. El aumento del contenido venoso suele ser más visible o evidente cuando el hombre está en posición de pie. En casos dudosos, se suele realizar una ecografía.
Siempre que se conozca que existe un varicocele es necesario, sobre todo en el caso de adolescentes y en adultos que consultan por infertilidad, realizar un análisis de semen (seminograma). “Esta prueba nos aporta datos sobre el número de espermatozoides, la forma de los mismos y el índice de motilidad, parámetros que sufren un mayor o menor deterioro en relación al tamaño del varicocele y del tiempo de evolución”, indica el especialista.

Cuándo y cómo tratar el varicocele

No todos los casos deben ser tratados, ya que hay hombres con varicocele que no tienen problemas de fertilidad. En la actualidad se indica la corrección en los casos puberales o de adolescentes con el fin de evitar lesiones en el futuro. También pueden ser tratados los pocos casos de varicocele que provocan síntomas a nivel del escroto en forma de pesadez y calor, aunque no llegue a provocar dolor ni alteraciones en la calidad del semen, y que curiosamente suele darse más en deportistas. En caso de adultos que consultan por varicocele, las cosas no están claras. Existen autores que dicen que por encima de los 30 años, la corrección no aporta ninguna mejoría sobre la fertilidad. Aún así, y dado que la cirugía del varicocele no es demasiado lesiva ni molesta, otros autores aconsejan su tratamiento a cualquier edad.
El tratamiento consiste en cirugía, mediante la ligadura de las venas espermáticas dilatadas.
“Las complicaciones, que se presentan en pocos casos, son la aparición de hidrocele (aumento del líquido que envuelve el testículo) y la atrofia del testículo. En una serie amplia de varicoceles intervenidos, ésta última no se produjo ni en el 1% de los casos”, comenta el urólogo.
En el caso de los varones con varicocele que acuden a un servicio de infertilidad para conseguir el embarazo, el tratamiento que se suele ofrecer es la corrección quirúrgica
, “es una intervención relativamente sencilla, se puede indicar y esperar una recuperación seminal, que se suele observar a partir de los seis meses de la cirugía. En los varones mayores de 30 años, y siguiendo a algunos autores, sería más práctico emplear técnicas que recuperen espermatozoides viables del eyaculado, realizando posteriormente diferentes técnicas de fertilización en la pareja”, indica el especialista.
La fertilidad no se recupera en todos los casos. Según diferentes estudios, se notifica una tasa de embarazos de entre el 30 y el 40% en parejas infértiles, en las que el varón con varicocele fue intervenido.