El colecho es una práctica en la que padres e hijos comparten la misma cama y sobre la que muchos especialistas debaten: algunos defiende sus enormes beneficios y otros destacan sus riesgos. ¿Sabes cuándo está contraindicado?
Asociaciones defensoras de la lactancia materna han promovido la reintroducción del colecho en los países occidentales, argumentando que los niños que comparten la cama con su madre maman más veces que los que duermen solos y que es una práctica eficaz para aumentar el vínculo entre padres e hijos. “Desde el punto de vista de los beneficios, favorece la lactancia, ya que el bebé que duerme en la cama de sus padres mama 1/3 más que el que no duerme con sus progenitores y también favorece un mayor vínculo con los padres”, explica Dr. Francisco Hijano, pediatra de Atención Primaria, coordinador del curso de actualización en pediatría y miembro de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap). El pediatra Nils Bergman, de la Universidad de Ciudad del Cabo, en Sudáfrica, recomienda que los niños duerman en la cama de los padres hasta los tres años basándose en un estudio que analizó los patrones de sueño de 16 niños: observó que los niños que dormían solos presentanaban mayores niveles de estrés y el patrón de sueño se alteraba con más frecuencia. La Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria dice que el colecho favorece la lactancia materna y no aumenta el riesgo de muerte súbita en el bebé: “Bien practicado, evitando factores de riesgo, no guarda relación con la muerte súbita del lactante”, dicen los pediatras.
Sin embargo, hay otros pediatras que lo desaconsejan, como el Grupo de Trabajo para el Estudio y Prevención de la Muerte Súbita Infantil de la Asociación Española de Pediatría (AEP), ya que lo relacionan con el Síndrome de Muerte Súbita del Lactante (SMSL): “La forma más segura de dormir para los lactantes menores de seis meses es en su cuna, boca arriba, cerca de la cama de sus padres”, dicen. “No podemos recomendarlo como una práctica segura habitual en menores de seis meses ya que puede haber un mayor riesgo de asfixia, síndrome de muerte súbita y alteraciones en la conciliación del sueño en edades posteriores, además de interferir en la relación de los padres”, explica el Dr. Francisco Hijano. A partir de los seis meses de edad no se han realizado estudios que aporten datos sobre los riesgos o no del colecho.
Cuándo está contraindicado el colecho
El colecho no se debe practicar en cualquiera de estas situaciones, según recomendaciones de la Asociación española de Pediatría:
– Si ha sido prematuro al nacer o ha presentado bajo peso.
– Si los padres se medican con fármacos que disminuyan el grado de alerta, ya que pueden no darse cuenta de que el bebé está en la cama y asfixiarlo.
– Si los padres toman alcohol o drogas en cantidad que afecte a su grado de alerta. Ante la duda, lo mejor es no poner a dormir al niño en la cama de los padres.
– Si la madre es fumadora. El consumo de tabaco en la madre durante el embarazo es un factor de riesgo para realizar el colecho.
– En situaciones de cansancio, especialmente de cansancio extremo, como el postparto inmediato.
– Nunca se debe practicar en superficies blandas, como el sofá o camas de agua. No es una superficie adecuada, ya que el niño puede quedarse atrapado en algún hueco y también porque puede haber mayor flexión del cuello del bebé e interferir en su respiración.
– Compartir la cama con otros familiares, con otros niños o con múltiples personas.