Los investigadores de la Universidad Johns Hopkins (EE UU) han hecho un estudio con solo 52 mujeres que predijo que el 85% de ellas iban a desarrollar el trastorno.
Los investigadores de la Universidad Johns Hopkins (EE UU) han hecho un estudio con solo 52 mujeres que predijo que el 85% de ellas iban a desarrollar el trastorno.
Este estudio es una herramienta más para un proceso que los especialistas explican como algo complejísimo. La OMS hizo un estudio con más de 70.000 mujeres de los cinco continentes y en todos los países del mundo ellas tienen más ansiedad y depresión. Aproximadamente, dos mujeres con ansiedad por cada hombre, y 1,5 con depresión. Hay expertos que relacionan esta tendencia a la depresión con las hormonas, algo que tras el parto se acentúa. Por eso, el apoyo social es una herramienta clave para superar el problema. Se recomienda buscar ayuda psicológica para vencerla. Y si la mujer es propensa a la depresión, tras el parto no debe agobiarse: ha de motivarse a salir, a realizar actividades de ocio; muchas madres asisten a clases de yoga o gimnasia con sus bebés: mientras ellas realizan gimnasia, los niños descansan en los cucos bajo su control. Se trata de salir más y relacionarse más, sin agobiarse por el cuidado del bebé o las tareas de la casa. Además, se aconseja buscar ayuda doméstica o de la familia para poder dormir y descansar unas horas mientras una persona cuida al bebé. Si no es posible, lo mejor es seguir el ritmo del niño: aprovechar para dormir cuando él lo haga.