Hasta ahora los prematuros tardíos (nacidos entre las semanas 34 a 36 de gestación) no tenían un registro de datos de seguimiento unificado, y tras su nacimiento reciben el alta hospitalaria sin asegurar una adecuada supervisión posterior de los especialistas. Por su peso y talla, más parecido a la del bebé nacido a término, no estaban considerados como un grupo de riesgo, aunque su maduración es incompleta y la posibilidad de padecer múltiples patologías (hipoglucemia, ictericia, apneas, etc.) es alta. Un lactante prematuro tardío tiene 7 veces más probabilidades de sufrir morbilidad neonatal, un riesgo 10 veces superior de hospitalización por Virus Respiratorio Sincitial y un 7% más de rehospitalizaciones durante el primer año de vida.
Hasta ahora los prematuros tardíos (nacidos entre las semanas 34 a 36 de gestación) no tenían un registro de datos de seguimiento unificado, y tras su nacimiento reciben el alta hospitalaria sin asegurar una adecuada supervisión posterior de los especialistas. Por su peso y talla, más parecido a la del bebé nacido a término, no estaban considerados como un grupo de riesgo, aunque su maduración es incompleta y la posibilidad de padecer múltiples patologías (hipoglucemia, ictericia, apneas, etc.) es alta. Un lactante prematuro tardío tiene 7 veces más probabilidades de sufrir morbilidad neonatal, un riesgo 10 veces superior de hospitalización por Virus Respiratorio Sincitial y un 7% más de rehospitalizaciones durante el primer año de vida. Además tienen mayor incidencia de inestabilidad térmica, hipoglucemia y dificultades en la alimentación.
Proyecto ACUNA, una herramienta on line
Hace más de un año un comité de pediatras de hospitales públicos unificaron sus criterios para poner en marcha una plataforma de registro que facilite el seguimiento del Prematuro Tardío de una forma homogénea. El resultado es el proyecto ACUNA, una herramienta on line que permite la recogida de datos sobre la morbimortalidad de los prematuros tardíos de una forma unicéntrica para contribuir a la reducción de la morbimortalidad y las secuelas que sufren estos pacientes.
Mediante la herramienta el médico recogerá en consulta datos de determinados factores que hasta ahora no se estaban monitorizando: ACUNA parte de los datos gestacionales y del nacimiento del neonato y a raíz de ahí va incluyendo los marcadores de nutrición, neurodesarrollo, infecciones, aspectos neumológicos y exploraciones. Estos parámetros serán monitorizados mediante la web desde el nacimiento hasta el cumplimiento de un año de edad del bebé.
La plataforma ACUNA, a la que los especialistas pueden acceder a través de un nombre de usuario y contraseña, ofrece la posibilidad de registrar el número de historia del paciente junto con el nombre y apellidos, que se guardarán en una base de datos exportable y permitirá a sus médicos imprimir un informe de visita del niño.
Los resultados que los especialistas esperan conseguir mediante el registro son impulsar el seguimiento de estos bebés en el hospital acorde con los datos que refleja la bibliografía internacional sobre su morbimortalidad así como unificar criterios en el seguimiento entre los diferentes hospitales y centros sanitarios.
Mercedes García Reymundo, neonatóloga del Hospital de Mérida, y miembro del comité que ha desarrollado la plataforma, afirma “que la idea de desarrollar este Proyecto proviene de la necesidad de mejorar el seguimiento de los prematuros tardíos que forman un grueso muy amplio y que en nuestro día a día vemos que tiene problemas muy importantes. Queremos mejorar el seguimiento para así poder detectar precozmente los problemas que puedan ir surgiendo en estos niños y pueda ser útil para evitar secuelas en el futuro”