El embarazo es un periodo en el que tu cuerpo experimenta grandes cambios y un enorme desgaste, especialmente, después del nacimiento del bebé. Una de las mayores preocupaciones para las mamás es recuperar su figura cuanto antes, ya que lo habitual es quedarse con algunos kilos de más. ¿Cómo adelgazar de forma saludable?
La recuperación post parto es un proceso que debe abordarse sin prisas, pero sin pausa. No existen atajos a la hora de recuperar nuestro peso ideal, y “durante las seis semanas que siguen al parto es desaconsejable hacer dieta, ya que puede ser perjudicial tanto para la madre como para el bebé”, indica Belén Benito, farmacéutica de Suavinex. De hecho, durante lactancia materna el desgaste calórico de una mamá equivale al de un deportista de alto rendimiento (1.800-2.500 calorías), por lo que una correcta alimentación tiene un papel fundamental en este periodo. “Lo ideal es incrementar la ingesta diaria hasta unas 1.800 calorías si se da el pecho, y se puede reducir a 1.200–1.500 si se opta por la lactancia con leche de continuación”, apunta la experta. Dar el pecho al bebé ayuda a la mujer a recuperar su peso con mayor facilidad, dado que con la lactancia materna la madre utiliza depósitos de grasa acumulados durante el embarazo para producir leche, por lo que es más fácil eliminar grasas.
La ingesta de líquidos es otro punto al que debe prestarse especial atención. Hay que beber mucha agua, al menos dos litros diarios: ayuda a hidratar la piel, además de ser una gran aliada para recuperar su luminosidad y tersura, previniendo el envejecimiento prematuro.
Una vez finalizada la cuarentena es conveniente recuperar la actividad física de forma progresiva. Puede empezarse con paseos cortos para, poco a poco, introducir otras actividades enfocadas a la recuperación del suelo pélvico, como la gimnasia abdominal hipopresiva (GAH), aconsejable tanto si el parto ha sido natural como por cesárea. Además, en esta primera etapa, resulta beneficioso prescindir del uso de fajas abdominales, permitiendo así la activación de la musculatura, lo que ayuda a tonificar la zona y a recuperar la sujeción natural de los tejidos. Pasado un tiempo prudencial, puede iniciarse la práctica de otro tipo de ejercicios, como por ejemplo Pilates, método que permite incrementar progresivamente la intensidad del esfuerzo.
Por último, para recuperar la piel debemos continuar utilizando una buena crema antiestrías, al menos durante las siguientes dos semanas tras el parto y sustituirla entonces por una crema reafirmante, que nos ayude a corregir la flacidez y restaurar la firmeza de los tejidos. A la hora de la ducha es preferible evitar el agua demasiado caliente: “es mejor usar agua templada, con un chorro rápido fresco al final para tonificar y reafirmar la piel”, explica la farmacéutica.
OCHO CONSEJOS PARA RECUPERAR LA FIGURA TRAS EL PARTO
1. DAR EL PECHO. Ayuda a recuperar tu figura con mayor facilidad, ya que el desgaste de una madre que amamanta a su bebé equivale al de un deportista de alto rendimiento (1.800-2.500 calorías). Esto es debido a que con la lactancia materna la madre utiliza depósitos de grasa acumulados durante el embarazo para producir leche, por lo que es más fácil eliminar grasas.
2. LLEVAR UNA DIETA SALUDABLE. De al menos 1.800 calorías si se opta por la lactancia materna. Nunca realizar una dieta hipocalórica, con una ingesta de menos de 1.500 kilocalorías diarias mientras se da el pecho, ya que puede ser perjudicial tanto para la madre como para el bebé.
3. BEBER DOS LITROS DE AGUA AL DÍA. Ayuda a hidratar la piel y evita el envejecimiento prematuro de la misma.
4.- PASEAR Y HACER GIMNASIA ABDOMINAL HIPOPRESIVA (GAH). Una vez finalizada la cuarentena, para fortalecer la musculatura del suelo pélvico (tanto si el parto ha sido natural, como si se trata de cesárea). Pasado un tiempo, podemos empezar con otro tipo de ejercicios, como Pilates.
5. EVITAR EL USO DE FAJAS ABDOMINALES. Aunque proporcionan comodidad y sujeción, impiden la actividad muscular, retrasando la tonificación de la zona abdominal.
6. UTILIZAR CREMA ANTIESTRÍAS. Al menos durante las siguientes dos semanas tras el parto, y sustituirla entonces por una crema reafirmante, que ayuda a corregir la flacidez y restaurar la firmeza de los tejidos.
7. EVITAR DUCHARSE CON AGUA MUY CALIENTE. Es preferible usar agua templada, con un chorro fresco y rápido al final de la ducha para tonificar y reafirmar la piel.
8. BUSCA TIEMPO PARA TI. Cuidar al recién nacido es muy absorbente y requiere de una gran dedicación, por lo que es fácil olvidarnos de nuestro propio bienestar y recuperación.