La piel de los niños es más sensible a los rayos de sol, por eso no se les debe exponer antes de los seis meses de vida. A partir de esta edad, cuando lo tomen, hay que tener mucho cuidado: utilizar cremas solares de alta protección, renovarlas con frecuencia y evitar las horas centrales del día que es cuando más indicen los rayos solares. Para concienciar a los padres, hemos recogido esta foto subida a Twitter por un médico, aunque ya no es habitual que suceda, aún hay padres que se despistan.
La piel de los niños es extremadamente sensible a los rayos solares. Tanto que, según explica Ángela Hernández, dermatóloga en el Hospital Beata María Ana de Jesús, en Madrid, si el pequeño ha sufrido quemaduras solares por exposiciones cortas e intensas, aumentará el riesgo de padecer cáncer cutáneo en el futuro. La dermatóloga advierte que los niños menores de 6 meses no deben exponerse al sol, incluso aunque lleven protección solar. Y para todos, en general, hay que evitar tomar el sol durante las horas centrales del día: de 12 de la mañana a 17:00 h de la tarde.
Cómo protegerse del sol
La Dra. Matilde Riquelme, pediatra en el C. S. La Chopera, de Madrid, explica que existen tres formas de protegerse del sol:
– CON MÉTODOS FÍSICOS. La ropa es un método sencillo y eficaz, debe de ser de fibras naturales (algodón, seda) y de color oscuro. El uso de camisetas tupidas es muy útil, así como los sobreros o gorras. Los niños deben usar gafas en condiciones intensas de radiación solar (mar, montaña) que estén homologadas y filtren los rayos UVA.
– CON MÉTODOS QUÍMICOS. Son preparados que asocian diferentes tipos de filtros solubilizados o dispersados en un excipiente. ¿Cuál usar? Los fotoprotectores químicos u orgánicos absorben la energía transportada por los fotones de las radiaciones UV. Estos filtros en general son incoloros y cosméticamente muy aceptables. Los fotoprotectores físicos o las pantallas minerales, son polvos inertes de origen mineral que actúan como barrera física. Protegen en menor medida que los anteriores de las radiaciones ultravioletas. Se consideran muy seguros, son fotoestables y no penetran en la piel. Su inconveniente principal es la baja cosmeticidad puesto que forman una película opaca en la piel, a veces pueden ser oclusivos produciendo sudamina o foliculitis. Los filtros biológicos son sustancias naturales de distintos orígenes que actúan captando radicales libres. Los más utilizados son la vitamina C y E así como ciertas aguas termales que contienen antioxidantes. Estos filtros se utilizan combinados con los anteriores.
– CON MEDIDAS DE PROTECCIÓN
Evitar la exposición solar en las horas de máxima radiación (12 a 17h).
No exponer al sol a bebés y niños muy pequeños. También se recomienda limitar las exposiciones solares en niños por debajo de los 3 años de edad. No se recomienda la aplicación de fotoprotectores en niños menores de 6 meses evitando así la hipotética toxicidad secundaria a la mayor absorción de la piel del bebé.
Utilizar cremas con factores de protección superior a 15. Aplicarlos cada 2 a 3 horas y después de cada baño.
Utilizar gorra y camiseta.
Desconfiar del tiempo nublado y del viento y cuidado con los reflejos solares (nieve, agua y arena)
No exponer al sol al niño tras aplicarle colonia o si están tomando medicamentosfotosensibilizantes (consultarlo con el pediatra).
Darles agua con frecuencia.
Enseñar con el ejemplo. Si queremos que los niños aprendan a protegerse del sol, nosotros los adultos somos el mejor ejemplo.
Nuevos solares
Existen muchos tipos de cremas solares en el mercado, pero has de elegir las que tengan la más alta protección (50 ó 100). Además, cerciórate de que son biodegradables y no tóxicas, es decir, respetuosas con el medio ambiente porque no se acumulan en los tejidos de los organismo vivos, como los peces. Ya hay empresas, como Avène, que han bajado un 25% el número de filtros y han eliminado las siliconas que son muy contaminantes en el medio marino. Si el niño debe ir de campamento o excursión, no olvides incluir en su maleta una crema solar con alta protección. La novedad este año es la crema “Réflexe Solaire” (protección 50) para niños, que cabe en el bolsillo del pantalón. Precio: 6,90 €.