El objetivo del estudio “La prevalencia del dolor lumbar y el dolor pélvico en las embarazadas, y factores asociados a un mayor riesgo de padecerlos”, fue determinar el porcentaje de mujeres atendidas en el Sistema Nacional de Salud que sufre dolor lumbar o pélvico durante el embarazo, e identificar los factores que se asocian a un mayor riesgo de sufrirlos. En él han participado 1.158 mujeres embarazadas de 7 o más meses. Sus resultados reflejan que el 71,3% de las embarazadas sufre dolor lumbar, el 46,2% dolor ciático irradiado a la pierna, y el 64,7% dolor pélvico.
Los resultados demuestran que el factor asociado con un mayor riesgo de padecer dolor lumbar durante el embarazo, es el hecho de haberlo sufrido previamente (con o sin relación con embarazos anteriores). En contra de lo que sugerían estudios previos que habían seguido métodos menos fiables, ningún antecedente obstétrico se asocia con un mayor riesgo de padecer dolor lumbar. Sin embargo, sí existe una correlación entre un mayor grado de ansiedad y la existencia de dolor lumbar.
Por su parte, los factores asociados a un riesgo mayor de padecer dolor ciático son el padecer o haber padecido dolor lumbar, ser más joven, dormir menos horas y padecer depresión. Los factores asociados al dolor pélvico son una fase más avanzada de gestación, el sobrepeso y la depresión.
Estos resultados descartan que el riesgo de dolor lumbar, ciático o pélvico durante el embarazo sea mayor entre las madres que han tenido más embarazos, partos o cesáreas previas, han ganado más peso durante el embarazo, o tienen un trabajo físicamente más intenso.