La endometriosis es una enfermedad ginecológica crónica, debilitante y dolorosa que se estima que afecta a una de cada diez mujeres en edad reproductiva, y para la que no existe una cura definitiva. Se caracteriza por un crecimiento del tejido endometrial fuera del útero, que puede causar inflamación y la formación de tejido cicatricial, especialmente en la cavidad pélvica y la zona abdominal. El síntoma común de la endometriosis es el dolor, que se puede manifestar de diferentes maneras, principalmente en el abdomen, en la parte baja de la espalda y en la zona pélvica.
La endometriosis es una enfermedad ginecológica crónica, debilitante y dolorosa que se estima que afecta a una de cada diez mujeres en edad reproductiva, y para la que no existe una cura definitiva. Se caracteriza por un crecimiento del tejido endometrial fuera del útero, que puede causar inflamación y la formación de tejido cicatricial, especialmente en la cavidad pélvica y la zona abdominal. El síntoma común de la endometriosis es el dolor, que se puede manifestar de diferentes maneras, principalmente en el abdomen, en la parte baja de la espalda y en la zona pélvica. La endometriosis además, es responsable de problemas de fertilidad en un 20-40% de las mujeres que la padecen, y la multiplicidad de sus síntomas, que en ocasiones se confunden con los de otras patologías, dificulta el diagnóstico, cuya confirmación definitiva solo es posible mediante cirugía laparoscópica.
Nuevo tratamiento
El nuevo fármaco contiene un gestágeno (2mg de dienogest), que ha demostrado ser una opción de tratamiento eficaz y bien tolerada, ya que permite un tratamiento a largo plazo. También actúa suprimiendo de forma moderada la producción de estrógenos del cuerpo, por lo que reduce el crecimiento del tejido endometrial estrógeno-dependiente, y ha demostrado reducir significativamente el dolor asociado a la endometriosis, así como las lesiones endometriosicas. En palabras del Dr. Juan Antonio García Velasco, director del IVI MADRID, “la endometriosis supone una importante carga para las mujeres que la padecen, causando dolor considerable y limitando su calidad de vida, su salud física e incluso su desarrollo social. Una nueva opción de tratamiento eficaz y a su vez bien tolerada a largo plazo, que pueda ofrecer a las mujeres un alivio significativo de sus síntomas, es por tanto muy bienvenida y viene a cubrir una importante necesidad de salud en la actualidad.”